En "Civil War", Alex Garland nos ofrece una visión alternativa y sombría de Estados Unidos, desgarrado por un nuevo conflicto civil. La película no solo es un thriller distópico; es también un estudio profundo sobre los efectos psicológicos y sociales de la guerra en el suelo natal, un tema poco explorado con tal intensidad en el cine estadounidense.
La trama sigue a un grupo diverso de periodistas en medio del caos: Lee (Kirsten Dunst), una fotógrafa de guerra veterana cuya carrera la ha dejado con cicatrices emocionales profundas; Joel (Wagner Moura), un periodista adicto a la adrenalina de los conflictos; Sammy (Stephen McKinley Henderson), un reportero experimentado que se enfrenta a los horrores de la guerra, y Jessie (Cailee Spaeny), una joven fotógrafa ansiosa por hacerse un nombre. Este grupo se embarca en una peligrosa misión para entrevistar al presidente en los últimos días de su mandato, interpretado con una profundidad sorprendente por Nick Offerman.
Garland utiliza este viaje no solo como un lienzo para escenas de acción impresionantes, sino también como una oportunidad para reflexionar sobre la desensibilización ante la violencia y el papel crítico del periodismo en tiempos de crisis. La película destaca por su realismo en la representación del conflicto y por su enfoque íntimo en el desarrollo de personajes, ofreciendo una mirada conmovedora y a menudo desgarradora a sus luchas internas y éticas.
Visualmente, "Civil War" es una maravilla. La cinematografía de Rob Hardy captura tanto la belleza como el horror del paisaje bélico, y las secuencias de combate funcionan a la perfección. Aunque el guion a veces se siente desconectado de un contexto político más amplio, los personajes y sus interacciones son lo suficientemente interesantes como para mantener a la audiencia enganchada.
UnLuciernaga
#1
Este fin de semana cae, me encanta su director, espero que esté a la altura y por lo que leo parece que sí.
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